Apariencia de las plantas

Estas plantas no escatiman en estética. Last Dance crece con una estructura robusta y ramas gruesas y bien espaciadas que sostienen cogollos gruesos y escarchados. Podrás apreciar tonos verdes y morados intensos bajo la densa capa de tricomas. La producción de resina es de primera calidad, dándole a todo un aspecto espolvoreado de azúcar que denota una calidad seria. Espera una planta densa, de tamaño mediano, con entrenudos sólidos y un atractivo visual.

Sabor y aroma

Abre un frasco de Last Dance y una rica ola de notas dulces y terrosas te inundará la nariz. Una cálida capa de fruta oscura, como un vino dulce con especias, se funde en algo terroso y húmedo. Ese equilibrio entre dulce y terroso también se mantiene firme en el sabor. Es suave y densa al inhalar, con un regusto profundo, a postre. Si te gusta la combinación de dulces originales con especias de la vieja escuela, te espera una delicia.

Efectos

Aquí es donde Last Dance realmente hace honor a su nombre. El subidón comienza con una sensación de cabeza pesada, lúcida pero profunda, como si estuvieras a punto de completar tu lista de tareas sin preocupaciones. Pero dale unos minutos y el cuerpo empieza a derretirse. Es una de esas variedades que primero se siente detrás de los ojos, luego por los hombros y la columna vertebral. Te relajas, sonríes y no te levantarás pronto.

Características de cultivo/rendimiento

Las semillas de cannabis Last Dance crecen rápido y tienen un final vigoroso. En interior, la floración finaliza en unas 8-9 semanas, ofreciendo flores densas y repletas de resina con mínimas complicaciones. Resiste bien el entrenamiento y se desarrolla de maravilla tanto en tierra como en hidro. En interior, puede obtener entre 450 y 550 g/m², y en exterior, puede alcanzar hasta 700 g por planta si se la cuida adecuadamente. Estas semillas de cannabis son perfectas para cultivadores que buscan calidad, sabor y potencia sin un mantenimiento complicado.